Con el desarrollo de la aviación mundial, los pilotos han necesitado siempre relojes profesionales y precisos que les permitan volar con seguridad. En un artículo anterior mencionamos la fiabilidad del modelo Aerospace Avantage, pero hoy nos centramos en uno de los grandes iconos de la marca suiza: los replica relojes Breitling Navitimer.
Ya en 1936, Breitling fue reconocido como proveedor oficial de relojes militares para la Royal Air Force, consolidando su prestigio en el mundo aeronáutico. Sin embargo, el verdadero punto de inflexión llegó en 1952 con el lanzamiento del legendario Navitimer 806. Este modelo otorgó a los pilotos, por primera vez, un reloj diseñado específicamente para sus necesidades.
El Navitimer incorporaba la célebre regla de cálculo circular, inventada por Breitling, que permitía realizar operaciones de vuelo esenciales. Gracias a esta funcionalidad, el reloj fue apodado el “ordenador de a bordo”, un compañero indispensable en la cabina.
No solo los aviadores profesionales adoptaron este modelo; la Asociación de Pilotos y Propietarios de Aeronaves (AOPA) también lo reconoció oficialmente, consolidando así la reputación de los replica relojes Breitling como instrumentos de confianza en el aire.
Hoy, después de más de medio siglo, el Navitimer sigue siendo un referente indiscutible en el universo relojero. Sus líneas clásicas, combinadas con su precisión, lo convierten no solo en la elección de los pilotos, sino también en una pieza muy buscada por los amantes de la relojería que valoran tradición y funcionalidad.